Berenjena: Los compuestos responsables de su ligero sabor amargo son reconocidos por su efecto colagogo, es decir, que estimula el buen funcionamiento del hígado y facilita el vaciamiento de la vesícula biliar, de manera que favorece la digestión de las grasas.
Alcachofa: Ayuda a eliminar toxinas, especialmente ácido úrico, y consigue evitar así la retención de líquidos. El hígado es el órgano que mas agradece el consumo de alcachofa. Ésta estimula la producción de bilis y resulta un gran producto para las enfermedades hepáticas.